Junto con otras modelos que salen de lo común, representando mayor diversidad de cuerpos y no solo las figuras ligeramente esqueléticas que vemos hoy en día. De chicas normales a con algunos “kilos de más” caminaron por la pasarela, pero con una cosa en común: su confianza y belleza.
Estas chicas lograron su sueño, en especial Graham: ser incluidas en este tipo de eventos y no ser rechazadas por lucir como muchas mujeres en el mundo somos. Rompieron esquemas y dejaron a todos con la boca abierta en el desfile. Un gran paso para que bajemos los estándares irreales.